lunes, 16 de agosto de 2010

Cómo está el servicio público

Hoy no he ido a trabajar, me he despertado con cierto malestar esta mañana y he decidido enviar un mensaje a una compañera avisando de mi ausencia, y acostarme otra vez.
Convertir una leve indisposición como la de esta mañana en una enfermedad (baja de tres días) me mantiene en la ilusión, una vez al año, de que no soy un esclavo del trabajo. Es la pequeña dosis de rebeldía, de malestar hacia el mundo que aun me permito.
Como necesito el papelito del médico para justificar mi baja (una enfermedad intestinal suele ser lo más recurrente en estos casos) he tenido que llamar al ambulatorio para pedir cita.
En mi última baja había que intentar llamar nueve o diez veces hasta que te atendieran, el servicio público no estaba tan mal todavía. Ahora de entrada salta uno de esos contestadores automáticos, médico o pediatra, fecha de nacimiento, nombre, sí, no, etc... unas veces, al final, la llamada se ha resuelto en un corte de línea (piden disculpas antes de cortarte), luego vuelta a llamar, otra vez médico o pediatra, fecha de nacimiento, nombre, sí, no, esta vez el teléfono da tono pero nadie lo coge, y vuelta a llamar... llevo 15 llamadas y no tengo muchas esperanzas, aunque seguiré insistiendo.
Cómo está el servicio público.

1 comentario:

  1. Al menos, no estàn haciendo huelga. O trabajando a reglamento.

    Aquì siempre estàn asì!!

    Un abrazo y que te mejores.

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